Partido Revolucionario de los Trabajadores
Por la Revolución Obrera, Latinoamericana y Socialista "El deber de todo revolucionario es hacer la revolución" (Ernesto Guevara)

Tamaño de texto + /29 de Abril - 2016

NACIONAL

PARO DEL 29 DE ABRIL: NOSOTROS VAMOS

Este viernes 29 de abril las cuatro centrales de trabajadores convocan a una movilización frente al monumento al trabajo. Esta es la noticia despojada de atributos políticos. Los ingredientes se los vamos a poner nosotros.

Como despertando de una buena siesta, los burócratas sindicales se deciden a pegar un “gritito”. Cientos de miles de trabajadores quedaron en la calle y una cantidad mucho mayor los seguirán si permitimos que éste sea nuestro destino: el persistir sosteniendo a la política de los patrones, la de los actuales y la de los que se fueron. No nos parece necesario que caractericemos extensamente a los dirigentes convocantes, todos son viejos conocidos y, tal como la burguesía, son los únicos que nunca pierden durante estas anunciadas y previstas crisis capitalistas. Es más, engordan.

Por lo que dijimos hasta ahora pareciera que no apoyamos la movilización, pero no es así, sino todo lo contrario, y en su versión corregida y aumentada. A nuestro entender, tendríamos que estar hace meses (o años) en las calles defendiendo con fiereza nuestros intereses y los de nuestros hermanos de clase. Tenemos que ser muy claros: de estos dirigentes no podemos esperar nada porque siempre trabajaron para frenar las luchas de los trabajadores y aparecer como los salvadores de último momento con los mendrugos que les tiran los patrones para tranquilizarnos. Tampoco podemos esperar nada de ningún partido o frente burgués. No nos olvidemos de que estos señores siempre tienen que andar “limpiando” los desastres de fiestas en las que nosotros fuimos el personal de servicio y ellos sus alegres participantes. Es siempre la misma historia: somos perros que nos mordemos la cola.

¿Por qué apoyamos, entonces, la movilización de los trabajadores? Es sencillo de entender: SOMOS TRABAJADORES, somos el Partido Revolucionario de los Trabajadores… ¿En qué otro lugar podríamos estar ese día…?

Durante el gobierno anterior participamos en todas las marchas y apoyamos los paros contra las políticas de ajuste, devaluación e inflación del FpV y socios, políticas que hicieron posible, además, el desembarco de estos bárbaros con los que además cogobiernan como hacen en las cámaras de diputados y senadores o en las provincias votando en conjunto leyes que nos destinan al hambreo y la pobreza. ¿Cuál es la razón por la que no tendríamos que hacerlo ahora?

Somos protagonistas absolutos de esta lucha porque es la lucha que tendrán que dar los obreros y el pueblo ineludiblemente. Tenemos que recuperar nuestros sindicatos, no abandonarlos, porque son una de nuestras herramientas de lucha y nos fueron traicioneramente usurpados. Tenemos que recuperar las calles porque fueron y serán nuestras, del proletariado, no de “caceroleros e indignados”. Tenemos que recuperar nuestros medios de trabajo porque somos los únicos que podemos hacerlos funcionar como fuerza liberadora, no como un yunque al que estamos encadenados.

Muchas veces escuchamos: “¡Ahhhh, Tosco…, si tuviéramos un Tosco…!” Bueno, lo tenemos. Y no sólo uno, tenemos a miles de “Tosco” entre los trabajadores que luchan. Tosco no se formó ni adquirió su portentosa inteligencia y honradez entre los libros de historia y economía. Estas herramientas imprescindibles fueron elementos que se amalgamaron en infinitas marchas y jornadas de lucha, en la práctica de todos los días.“Tosco” no aparece mágicamente en estos lugares grises y confusos de la lucha contra patrones, burócratas y gobiernos represores, SE FORJA AL CALOR DE LA LUCHA DE CLASES.

Entonces, ¿Por qué marchamos y con quién? Nos movilizamos porque es una forma legítima y necesaria de combate frente al avasallador poder destructor y de rapiña del capitalismo terminal en el gobierno -poder que todavía puede dar terribles zarpazos y los dará-, y lo hacemos con nuestro pueblo, llevando nuestras consignas y volantes como única bandera.

No vamos a festejar las palabras de los burócratas sindicales ni tampoco iremos con “asco”, como decían que había que votar al candidato del FpV en las elecciones presidenciales. Concurriremos alegres, con nuestros compañeros y el pueblo, como un preludio de ejercicio revolucionario.