El Combatiente Nº 31
Junio / Julio - Edición Nº 31
 

SITUACIÓN NACIONAL

El conflicto -que no es conflicto- burguesía campesina versus SU Estado o, mejor dicho, SU Gobierno o la Administración actual de SU Estado, ha entrado en un “cono de sombras”, después de propinarles y atribuirles una serie de insultantes características humanas y de clase, a una pequeña porción de la fauna: pingüinos, vacunos y palomas... Ninguna argentina ni ningún argentino, en su sano juicio, imputarían a esos pobres animalitos por ser mentirosos, mezquinos o por pronunciar dobles discursos, tal como lo hacen los representantes de ambos bandos. Tampoco nadie acusaría a estas inocentes criaturas de otra especie de contaminar el medio ambiente, sembrar el hambre a lo largo y ancho del país, desabastecer mercados, hacer subir los precios, cortar rutas, expulsar de sus tierras a los verdaderos dueños de las tierras, no defenderlos de los atropellos de los grandes latifundistas ni legislar para su protección, votar leyes como la flexibilización laboral… Mucho menos, ninguno de estos animalitos podría sostener, en público, que llegó a presidente y que estuvo en contra de todo eso, cuando sigue manteniendo el trabajo en negro, las jubilaciones miserables, la educación que no es educación, la salud pública que no es salud… Tampoco manifestar que, desde su banca, ha peleado contra todo eso, pero pidiendo que tengamos paciencia, que TODO no se puede hacer en tan poco tiempo…

Ya escuchamos a Alfonsín, a Menem, a De la Rúa, a Duhalde, a Kirchner y nada ha cambiado en nuestro favor. No por acción de los gobernantes, precisamente. Intentan adormecer nuestra conciencia para continuar haciendo lo mismo. Gane quién gane, en esta puja, hay un solo perdedor: el proletariado de la ciudad y el campo, LOS VERDADEROS CAMPESINOS POBRES, los pobres de la ciudad y el campo.

El enemigo de clase, la burguesía financiera, tiene muchas caretas, pero un solo objetivo: no resignar ni un poco de sus ganancias y privilegios. Los que administraron y administran SU Estado, también tienen el mismo objetivo: no permitir que el proletariado en general y la clase obrera en particular recompongan sus fuerzas y organizaciones para disputarles el poder a sus amos y que tampoco puedan crear las condiciones para decidir su futuro y el del país, que nada tiene que ver con este presente.

Para entender al enemigo es necesario hacer memoria e historia y conocer, en grandes líneas, cómo ha llegado a tener tanto poder manteniéndolo durante tanto tiempo. En grandes rasgos, diremos que, desde 1810 hasta la conformación de la Argentina como Nación -1853-, dos sectores de la clase dominante se disputaron la propiedad del puerto: la burguesía comercial, primero ligada al comercio con España, y luego vinculada con Inglaterra y una naciente burguesía campesina que acumulaba grandes porciones de tierra ganadas al indio en sucesivas campañas al “desierto”. La capacidad de estos dos sectores de la clase dominante para hacer creer que sus mezquinos intereses particulares son los intereses de TODOS, va a ser una constante en la historia del país, junto con la capacidad de comprar o alquilar conciencias de otros sectores sociales. La lucha militar entre estos sectores trocó, luego de 1853, en lucha política. Se crearon partidos políticos y realizaron elecciones hasta la irrupción de movimientos policlasistas como el radicalismo, movimiento cuya dirección nunca cuestionó de fondo el “modelo” de desarrollo del país, sino un “lugar” dentro ese “modelo”.

La Ley de Sufragio Universal fue la sepultura de los partidos de la alianza burguesía comercial-oligarquía terrateniente desde el punto de vista político. También quedó al descubierto la ínfima minoría que la componía como sector de clase y el inmenso poder económico e ideológico que imponía su impronta, a cualquier costo y con cualquier método, a toda la sociedad. Tanto es así, que ordenó matar al Senador Lisandro de la Torre... Esta es la clase que hoy habla de “no violencia” y se llena la boca haciendo “profesión de fe democrática”. Es la misma que taladró, infiltró y dividió al radicalismo, pero que no le alcanzó para imponer plenamente sus intereses.

Es aquí cuando se presenta en sociedad el primer PARTIDO MILITAR: en el golpe de 1930. Luego lo hará en el ’55, en el ’62, en el ’66 y, por ahora el último, en 1976.

El Combatiente Nº 31En 1976, apuntaron a desarticular toda la infraestructura y las empresas estatales, con lo que se privó al Estado Argentino de renegociar mejores términos con el imperialismo en lo externo y quitarles a los dos movimientos más importantes, peronismo y radicalismo, las palancas para negociar externa e internamente.

No es verdad que el Estado burgués ha perdido poder, sino que ha cambiado de función. Ya no aparenta estar “sobre” las clases: está al exclusivo servicio de la burguesía financiera nativa e internacional. Consuma los intereses privativos de ese sector de clase a la que están incorporadas, selectivamente, la vieja burguesía comercial y la vieja oligarquía terrateniente, ambas devenidas en burguesía financiera, aliadas y asociadas, como lo estuvieron siempre, a la burguesía imperialista.

Su actual “debilidad” debemos buscarla en las relaciones con el imperialismo hegemónico, con la crisis del sistema capitalista y no solamente en factores internos. A medida que la crisis internacional se agudice, también se agudizarán los problemas para mantener su hegemonía. Esto es lo que está en juego para la burguesía financiera nativa e internacional y no, solamente, las retenciones.

La mediana y pequeña producción, asentada en la “pampa húmeda”, cuya producción y existencia es NECESARIA para otorgarle mayores ganancias a los grandes latifundios por la renta diferencial surgida de los diferentes costos de producción, ha perdido, en su mayor parte, el carácter de productores para pasar a la categoría de rentistas. Arriendan sus campos para que los exploten los latifundistas, asociados a las agro-químicas, empresas ligadas al comercio exterior, multinacionales de la alimentación y pools varios, a cambio de una pequeña, pero segura, parte de las ganancias. Así, y solamente así, puede explicarse la ferocidad con que pelean para cambiar la determinación del gobierno acerca de las retenciones. Concluyendo, el poder económico de la burguesía financiera ha logrado, momentáneamente, atraer hacia su bando a un sector de la pequeña burguesía del campo.

Lo mismo ha ocurrido con la pequeña burguesía urbana que ha invertido sus ahorros en fondos de inversión. Estos fondos están apuntando a la especulación en el rubro de la alimentación que, con los precios fluctuando hacia el encarecimiento y en medio de un proceso inflacionario mundial, promete prontas y jugosas ganancias…

Todos sabemos que la pequeña burguesía es un sector fluctuante que teme a la proletarización y a la revolución. En el marco de las inéditas condiciones actuales que no durarán mucho tiempo, la interrelación entre lo interno y externo, la interdependencia que genera el sistema capitalista, es de prever que la crisis estalle en el país hegemónico y se traslade, con más o menos rapidez, hacia todos los países periféricos, generando una situación crítica que puede prolongarse en el tiempo.

Explicado, sintéticamente, lo anterior, podemos deducir que el “conflicto” con el “campo” existe, pero no con la dimensión que se nos quiere presentar. Y dado el grado de concentración de las riquezas en tan pocas manos, no se resuelve con un aumento de las retenciones para una incierta “redistribución de las riquezas”.

Otro es el problema con LOS VERDADEROS CAMPESINOS POBRES. Ellos también están a merced de los pulpos de la alimentación como Nabisco, Nestlé, Knorr Suiza, Mastellone y otros que los exprimen, tal como lo hacen los bancos. Son aquellos que pese a ser dueños de las tierras nunca se las titularizan, los que están a merced de jueces y policías venales y corruptas que los expulsan de sus tierras, agravando la pobreza y miseria en el interior del país. Existen gobernadores terratenientes que se apropian de tierras fiscales. No se puede creer que el gobierno nacional desconozca esta situación y menos que permanezca impasible. Lo que aún siembra más desconcierto es que los tenga de aliados... Este cúmulo de contradicciones entre lo que se dice y lo que se hace genera desconfianzas muy profundas.

Como Partido estamos impelidos a dejar claro que no igualamos al actual gobierno con ninguna dictadura militar, pero sí caracterizamos que la democracia en la que vivimos es democracia para la burguesía y es dictadura para el proletariado. Sabemos que la lucha la debemos librar en el terreno político e ideológico.

Creemos que la respuesta que dio la Señora Presidenta, el 18 de junio, fue inteligente a pesar de que tiene algunos errores históricos y otros conceptuales. Veamos: “me vieron los trabajadores y sus dirigentes sindicales, negarme a votar, allá en el ’98, la Ley de Flexibilización Laboral”. La Ley vigente, aprobada después de ser descartada la anterior por estar sospechada de existencia de coimas, es de igual o peor tenor y fue enviada al Congreso por el actual Ministro de Trabajo, Carlos Tomada. Usted sabe, señora, que la inmensa mayoría de la dirigencia sindical no responde a sus bases y que no fue elegida en elecciones libres ni democráticas; que los estatutos de los sindicatos, en su gran mayoría, son violatorios de la Constitución Nacional y no respetan la letra, mucho menos el espíritu constitucional, otros son tan secretos que nadie los conoce… ¿Cómo puede ignorar lo que muchos obreros sabemos sobre Moyano y no iniciar o instruir para que se inicie una investigación a fondo acerca de él…? No sólo sobre Moyano, sino sobre toda la “dirigencia” sindical. Es llamativo y sugestivo el apoyo que les brinda, por lo tanto no genera ninguna confianza en Usted. Es una contradicción flagrante la elección de Moyano como Secretario General de la CGT con la declamada “redistribución de la riqueza nacional”, porque entrega atado de pies y manos al proletariado. Por lo menos, ésa es la interpretación que tenemos la inmensa mayoría de los proletarios. En este caso, Usted propone, pero es la lucha de clases, en la que Ud. no cree, quién dispondrá en última instancia.

Es sabido que los señores terratenientes han obtenido enormes ganancias a partir del gobierno de Néstor Kirchner; que al aumentar la riqueza de forma tan concentrada también creció la pobreza en forma proporcional. Creemos que está mal informada, Señora. En 1910 no había hambre en Buenos Aires. Lo que desató la feroz represión sobre los trabajadores, que siempre pelearon, fue la decisión del gobierno de mostrarle una ciudad “ideal” a la Infanta Isabel de Borbón. Los locales sindicales, los periódicos anarquistas y socialistas, los obreros en las calles protestando, no eran parte del Buenos Aires “ideal” y por eso quisieron “desaparecerlos” con brutales represiones. Con todo respeto Señora, un país puede ser soñado, pero no se lo puede realizar de forma ideal y mucho menos con expresiones de deseos, sino con firmes decisiones políticas, con el respaldo y la organización del proletariado y del pueblo. Se lo hace o no se lo hace. Fíjese: Juan Domingo Perón nacionalizó el Comercio Exterior. Fue, en ese aspecto y sólo en ese aspecto, un ejemplo. ¿Por qué no lo hace Usted…?

No hay intereses naturales, salvo la supervivencia de las especies. Los intereses en unaEl Combatiente Nº 31 sociedad dividida, objetivamente, en clases, son intereses de clases.

Esos cuatro señores, burgueses del campo, no fueron elegidos para cargos en el Estado Burgués, pero sí fueron elegidos dentro de sus organizaciones para representar los intereses de sus sectores. Tienen derecho a deliberar dentro y fuera de sus organizaciones. Lo que no pueden hacer, LO QUE NO DEBEN HACER, es imponer sus intereses al resto de la sociedad. Eso se llama SUBVERSION, porque están subvirtiendo “el orden establecido” por la Constitución Nacional. Fue importante que los mandara a formar SU partido político y que se presenten a elecciones pero, antes, DEBEN purgar penas por su accionar subversivo. Usted no los reprimió, no los encarceló y así, estamos convencidos, no se construye calidad institucional, así se construye INJUSTICIA Y DESIGUALDAD. ¿Qué dirán los docentes de Neuquén, con Carlos Fuentealba muerto, qué dirán los habitantes de la Quiaca, los obreros de Mafisa…? Tienen todo el derecho de pensar que la calidad institucional que Usted declama, es sólo para los patrones y que para ellos son los palos, las balas de goma o de plomo y la cárcel.

Creemos que el gobierno sabe mucho más de lo que ya dijo sobre la situación del campo en general y de los “productores en conflicto” en particular.

En algunas ocasiones nos hemos referido a los medios de comunicación, los hemos adjetivado de plumíferos al servicio de sus patrones y del imperialismo, los caracterizamos de mercenarios y otras “lindezas”. Hoy, vamos a advertirles sobre el indigno papel que juegan contra sus propios intereses. Por empezar, no deben olvidarse que lo único absoluto es el movimiento. Puesto en otras palabras: lo que hoy ES, mañana DEJA de serlo… Que no deben olvidarse que son empleados, tengan linda o menos linda voz, tengan linda o menos linda figura, sean más o menos seductoras/es. SON EMPLEADOS. Que sus intereses nada tienen que ver con los intereses de sus patrones. Que esto que hacen se llama GUERRA PSICOLÓGICA y la están haciendo contra su clase, el proletariado, la están llevando adelante contra la clase obrera. Ser parte integrante de un bando, en este caso, el de los patrones, contra SU PUEBLO, el otro bando, tiene sus consecuencias. Que al final de la contienda cada cual debe rendir cuentas y no se PUEDE, no se DEBE aducir obediencia debida y, mucho menos, ignorancia. Porque como decía un gran filósofo alemán -Federico Engels- “la ignorancia no es argumento para nada”.

En artículos de El Combatiente hemos mencionado a Goebbels como uno de los símbolos del nazismo, pero también como uno de los precursores de la guerra psicológica. Decíamos que si Goebbels viviera se pondría orgulloso, por un lado, y pálido de envidia, por otro, al ver tantos émulos y constatar que muchos de esos émulos lo superaron ampliamente en el uso de la media verdad o de la media mentira y del doble discurso. Es seguro que muchos de estos escribas leen las mismas informaciones que nosotros y quizás más, porque es su profesión, pero las silencian y tergiversan para “poner contentos” a sus amos. Algunas “perlitas” que silenciaron antes, durante y actualmente siguen silenciando:

1) En el Ministerio de Trabajo existe una Comisión Nacional de Trabajo Agrario (CNTA) que reúne a los trabajadores, las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), la Federación Agraria Argentina (FAA), Coninagro, la Sociedad Rural Argentina (SRA) y el Estado. Las resoluciones de la CNTA son de aplicación obligatoria. Veamos lo que callan los escribas del imperialismo en esta temática, pero, antes aclaremos que sólo el 25% de los peones de campo están reconocidos legalmente como tales y el 75% restante no está registrado por los grandes “defensores del país, la democracia y otras yerbas”.

  1. Jornada laboral de 8 horas. Las cuatro entidades agropecuarias en contra y a favor de la jornada de “sol a sol”.
  2. Premio para el trabajador que termine la escuela, tanto primaria como secundaria. Las cuatro entidades agropecuarias en contra: no quieren “sabihondos” ni instruidos en sus campos.
  3. Provisión de ropa de trabajo para los peones con más de 3 años de antigüedad. Todas en contra.
  4. Provisión de capa para la lluvia. Todas en contra, a pesar de que la capa sería devuelta al retirarse de la empresa. ¡Que sensibilidad…!
  5. Límite de horas extras a 30 semanales (que, sumadas a las 48, son 78 horas por semana, o sea 13 horas de trabajo por día), pago de las mismas con el 50% de recargo. Todas las entidades agropecuarias en contra. ¡¿Qué pretenden estos negros?!
  6. Se fijaron $0,40 por kilo de algodón cosechado, en total $19 por 8 horas de trabajo continuo. Todas en contra. ¡Era mucho para un peón!

2) Veamos cuánta plata “pierden” los “grandes defensores del campo y la patria”.

a) Un productor de 150 hectáreas esperaba una ganancia de 203 dólares por hectárea en octubre cuando sembró la soja, pero cuando cosechó, en mayo, ganó 349 dólares por hectárea.


b) Un productor de 2.000 hectáreas esperaba u$s 506 por hectárea y resultó que en mayo ganó u$s 667.


c) El precio de la soja de octubre a mayo duplicó su valor y las retenciones aumentaron del 27% al 44%, un 17% más, contra un 100% del precio de la soja.


c) Monsanto, aprovechando el revuelo, aumentó el glifosato en 47% y nadie, ningún “productor”, dijo nada…

El Combatiente Nº 31Las Federaciones Agrarias Argentinas (FAA) tienen como principal fuente de financiamiento la venta de CARTAS DE PORTE, que son las autorizaciones OBLIGATORIAS para el movimiento de cereales. Con esto, LOS PIQUETEROS TERRATENIENTES tienen un negocio de u$s 4 millones sin arriesgar nada. Eso es cuando venden LEGALMENTE… Sin embargo, el gobierno SABE que VENDEN ILEGALMENTE otros u$s 10 millones, producto de la estafa al fisco, por la comercialización de 9 millones de toneladas de granos sin pagar impuestos. Como se ve, los PIQUETEROS TERRATENIENTES NO ANDAN CON “pequeñeces”.

Estos choques de “intereses” se enmarcan en el desarrollo de contradicciones secundarias e interburguesas. El Partido tiene la tarea de desnudarlas y no de apoyar a tal o cual bando. Desnudarlas significa que debemos ir con nuestros análisis y propuestas a toda la sociedad. Debemos dejar claro que aquí no hay ninguna propuesta de desarrollo y progreso, que la distribución de la renta nacional no depende de una “concesión graciosa” de ningún gobierno de la burguesía financiera, sino que depende de la acumulación de fuerza y organización del proletariado en general, de la clase obrera en particular, desarrollando políticas y propuestas para sus aliados y para toda la sociedad que, objetivamente, esté interesada en un mundo y un país mejor.

Para eso necesitamos fortalecer aún más al Partido. Seleccionar más y mejor a los militantes que llegan. Los que están dispuestos a avanzar, bien. Los que aún no han agotado las experiencias, que las agoten fuera de nuestros ámbitos. Tendremos sobresaltos y no hay que detenerse por ellos. Debemos seguir avanzando. Avanzando en la confianza en las masas. Ellas serán la fuente de soluciones. Darles a los problemas la importancia y las dimensiones que tienen. Ni más, ni menos, pero siempre mirando hacia delante. Todo lo que viene es mejor.

El proletariado en su conjunto ha dado un gran paso en este conflicto: no lo pudieron embarcar los de un lado ni los del otro. Signo de que percibió que sus intereses no estaban en esa “pelea”. Ambos bandos han quedado o quedarán aún más debilitados. Por lo tanto, son de prever mayores luchas y de caracteres distintos.

Carlos Ponce de León.

INTERNACIONAL

Lenta y progresivamente, sin pausa ni prisa, continúa la profundización de la crisis del sistema capitalista. Sus aristas más dolorosas se manifiestan en el sistema financiero, tal como era de esperar. Pero, también hay indicios en la producción que presenta signos de paralización en algunos rubros como en la construcción, la industria automotriz y tenues atisbos de recesión en la siderurgia.

Las medidas que hasta aquí ha tomado la burguesía imperialista no parecen tener efectos y, por el contrario, parecen inocuas e inofensivas.

Está quedando en evidencia que las intervenciones de los bancos centrales en el manipuleo de las monedas van perdiendo efecto y que el keynesianismo adoptado luego de la crisis de 1929 ha sido prácticamente borrado y superado por las nuevas prácticas de la burguesía financiera en lo que se ha dado en llamar “neoliberalismo”.

La intervención de los llamados “fondos soberanos” -sovereign wealth funds-, en el rescate de los grandes bancos, bolsas y fondos de inversiones internacionales han “inyectado” más de 66.000 millones de dólares para garantizar la necesaria liquidez y salvarlos, momentáneamente, de la anunciada bancarrota. En el número anterior de El Combatiente hablamos de una serie de bancos que tuvieron que ceder parte de sus paquetes accionarios a cambio del salvataje que instrumentaron esos fondos soberanos.

Dubai (DIC Dubai Internacional Capital), Kuwait (KIA Kuwait Investment Authority), Qatar (QIA Qatar Investment Authority), Abu Dhabi (ADIA Abu Dhabi Investment Authority), China (CIC China Investment Corporation), son sólo algunos de los fondos soberanos que operan. Los países petroleros, como Arabia Saudita, Noruega, Canadá e incluso el estado de Alaska, crearon fondos soberanos para proteger las fortunas que arroja la explotación de sus cuencas petrolíferas. Pero también lo hacen países que tienen grandes excedentes comerciales como Singapur y China.

En realidad, los fondos soberanos no son una novedad: comenzaron a generalizarse, en la década del 80, porque las monarquías petroleras decidieron no repetir la experiencia de la década del 70, cuando dilapidaron las fortunas acumuladas durante el primer boom petrolero en armamentos, yates, joyas, mansiones en el Mediterráneo y palacios en medio de desiertos. Tomaron el ejemplo de Kuwait que, en 1953, creaba su “Fondo de Reserva para las Futuras Generaciones”, el primero de los que aún no se llamaban fondos soberanos y que luego fuera rebautizado KIA (Kuwait Investment Authority).

El Combatiente Nº 31Los fondos soberanos son los nuevos instrumentos financieros que no tienen nada que ver con los fondos de pensión, creados por las cajas privadas de jubilaciones para rentabilizar los haberes; tampoco están relacionados con los fondos de inversión, creados por inversores para obtener rápidos y grandes beneficios en poco tiempo; y, mucho menos, con los fondos de cobertura (hegde funds), concebidos para operaciones de corto plazo y de grandes ganancias especulativas.

Sobre la economía mundial, los fondos soberanos tienen un enorme peso: duplican el monto de los fondos de cobertura y equivalen al 7% de la capitalización mundial. Además llevan ese nombre porque son creados por los Estados o los Bancos Centrales de países periféricos que, como decimos más arriba, invierten sus excedentes monetarios provenientes de la producción de petróleo o sus excedentes comerciales. Inclusive Brasil estudia la posibilidad de crear su propio fondo soberano con el excedente de sus exportaciones…

El Combatiente Nº 31En poco menos de tres meses, estos nuevos protagonistas de la economía mundial incorporaron 66.000 millones de dólares para “oxigenar” a bancos, bolsas y fondos de inversiones de los países centrales que estaban al borde de la quiebra por haber creado y alimentado las distintas burbujas financieras concediendo créditos sin garantías o con garantías poco seguras en su afán de más y más ganancias, tal como corresponde a la etapa de la hegemonía del capital financiero. “Ningún inversor, ni institución es capaz de poner tanto dinero junto sobre la mesa en tan poco tiempo”, sostiene el economista francés Elie Cohen.

Actualmente, los fondos soberanos poseen unos 3 billones de dólares a nivel mundial y según las proyecciones del banco Standard Chartered, seguirán creciendo hasta llegar a 13,4 billones en el 2013.

Es lógico que con el manejo de tan importantes cifras se hayan convertido en protagonistas y bomberos de la economía capitalista.

Los políticos e inversores de la burguesía imperialista deben digerir y tragarse sus espasmódicos e hipócritas arranques chauvinistas, cerrar los ojos, fruncir las narices y acallar sus pruritos cuando acuden a pedir la ayuda de esos capitales sin siquiera mirar su origen: para ellos, lo más importante es prolongar la agonía del sistema que justifica su razón de ser como clase.

Los fondos soberanos son una oportunidad para nuestro país”, dijo hace poco tiempo Alistair Darling, canciller del Tesoro de la “Rubia Albión”, interesado en atraer esos capitales para reflotar la casi quebrada economía británica. Darling hizo ese comentario luego de una visita de expertos británicos a Pekín, donde se reunieron con Lu Jiwei, viceministro de Finanzas. Lu es la persona que maneja los 130.000 millones de dólares del China Investment Corporation (CIC), el fondo soberano creado por el Estado chino para invertir una pequeña parte del más de un billón de dólares de reservas que acumuló el Banco Central en los últimos tiempos…

El Combatiente Nº 31Tan grande es el poder de algunos fondos soberanos que ya comenzaron a fagocitarse los fondos de inversión: en mayo pasado, China Investment Corporation (CIC) pagó 3.000 millones de dólares por el 10% del capital de Backstone, uno de los tres fondos de inversiones más importantes del mundo. El fondo Mubadala de Abhu Dhabi, por su parte, compró el 7,5% del poderoso fondo de inversiones Carlyle, en u$s 1359 millones.

En el 2006, capitales del emirato de Dubai quisieron comprar seis instalaciones portuarias en Nueva York. El senador Charles Schumer se escandalizó y lanzó una campaña para hacer fracasar la operación con la consigna de que “esa amenaza puede abrir una brecha a los terroristas”. Sin embargo, a fines de 2007, Schumer, estrechamente vinculado con los grandes inversores de Wall Street, acogió con los brazos abiertos la llegada de los u$s 7.500 millones que invirtió ADIA (Abu  Dhabi Investment Authority) para comprar el 4,9% del capital del Citigroup… La operación causó estupor en Estados Unidos por lo emblemático que es el banco, pero se acallaron todos: “¿Que diría la opinión pública si el banco tiene que despedir a 10.000 empleados por no aceptar una inversión extranjera debido a pruritos nacionalistas?”, advirtió la prensa financiera estadounidense.

Menos escrupulosa y con más experiencia en la prostitución, la burguesía imperialista británica aceptó calmadamente la toma de participación del 48% de la Bolsa de Londres por parte de los fondos de Dubai (28%) y Qatar (20%), firmada en septiembre del año pasado. También adquirieron porciones importantes del Nasdaq norteamericano, los bancos Barclays y Bear Stearns, a los que salvaron una primera vez de la bancarrota en octubre del 2007 con u$s 1000 millones del fondo chino Citic, para crear la alianza bancaria en Asia. La burguesía imperialista europea y norteamericana ve con preocupación este avance, pero nada pueden hacer, confirmando así, que el capital no tiene patria y el dinero es su único dios.

Los fondos no sólo participan e invierten en cuestiones financieras, sino que abarcan todos los sectores de la economía. En junio del pasado año el Dubai International Capital (DIC) compró el 3% del paquete accionario del grupo aeronáutico espacial EADS, que fabrica los aviones Airbus y es parte de la construcción de los cohetes Ariane. En septiembre, el banco estatal ruso Vnechtorgbank compró por u$s 1.400 millones el 5,06% del grupo.

El Combatiente Nº 31En Francia, según Europlace, ya son dueños del 4% del CAC40, el índice que agrupa a las 40 empresas más grandes de la Bolsa de París. El fondo Isthitmar de Dubai adquirió las grandes tiendas Barneys de Nueva York. El fondo Dubai International Capital (DIC) controla entre el 5 y el 7% de Sony;  y KIA de Kuwait tiene el 7% de Daimler Chrysler. En noviembre del 2007, el grupo financiero Delta Two, que maneja los capitales de la Qatar Investment Authority (QIA) en Londres, estaba dispuesto a pagar u$s 23.000 millones para aumentar su participación de 25% a 100% en la cadena británica de grandes almacenes Sainsbury’s. La operación no se concretó: el jeque Ben Califa al-Thani prefirió guardar ese capital en sus manos para usarlo frente a la crisis de las subprimes que se agravaba rápidamente. Los emiratos no dejan que la crisis los atemorice. Por eso, los fondos soberanos de Abu Dhabi y de Qatar llegaron a un acuerdo: el lunes 24 de marzo para crear un fondo común de u$s 2000 millones destinado a comprar e invertir “en todos los sectores” y “en cualquier parte del mundo”.

El Combatiente Nº 31La profusa llegada de dólares provenientes de los fondos soberanos detona severas preocupaciones a nivel internacional. Un estudio de Morgan Stanley advirtió que, en poco tiempo, el volumen de los fondos soberanos llegará a u$s 8,7 billones, cifra superior a las reservas de los bancos centrales de los países desarrollados, que consisten en u$s 7,4 billones... Esa monumental masa de capital es capaz de desestabilizar un mercado en menos de veinticuatro horas.

Los grandes exportadores no quedarán inactivos por mucho tiempo. De alguna manera tienen que canalizar el torrente de dólares que produce el petróleo a u$s 140 el barril. Según Financial News, se calcula que ganan más de u$s 2.000 millones cada veinticuatro horas, lo que permite prever que, a ese ritmo, los fondos soberanos se transformarán en un protagonista fundamental de la economía mundial y pueden pasar a ser un arma de poder político.

Al borde del pánico, de frente a esta tendencia, las burguesías imperialistas buscan afanosamente una forma para “disciplinar” la incorporación de esos capitales a las economías de sus países. En la reunión de ministros de finanzas del G7 de octubre del 2007 en Washington, el secretario del tesoro, Henry Paulson, sostuvo que se debían estudiar las “consecuencias potenciales que podrían tener sobre los mercados financieros y las inversiones”. Por su parte, la Unión Europea advirtió que bloqueará cualquier operación hostil lanzada por un fondo exterior a sus fronteras. La Unión Europea, el Fondo Monetario Internacional y la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico están preparando un código para regular las operaciones de esos fondos en las economías occidentales. El pánico proviene de que esos fondos son instrumentos creados por los Estados y que, en cualquier momento, pueden ser usados como un arma financiera al servicio de intereses políticos y geopolíticos, algo privativo de las burguesías imperialistas, de la gran aristocracia financiera y no de plebeyos enriquecidos que pertenecen a países periféricos...

Por ejemplo, rusos y chinos pueden dejar de comprar Bonos del Tesoro, hecho que tendría severas consecuencias para la burguesía imperialista norteamericana y su economía; los capitales árabes podrían tentarse y crear una empresa de compra-venta de petróleo y mantener los precios del barril en altos niveles o manipular los precios a sus antojos, algo que sólo los imperialista creen tener el derecho de hacer…

La determinación iraní de crear un mercado de petróleo para salirse de las trampas de Londres y Nueva York, fue lo que precipitó la catarata de acusaciones sobre el supuesto plan nuclear militar y justificar una agresión en contra de Irán. La burguesía israelí, peón de la burguesía imperialista yanqui, continúa con el desarrollo del plan de agresión y está entrenando a sus fuerzas armadas para llevarla a cabo: el mes pasado, la Fuerza Aérea Israelí realizó una maniobra masiva sobre el Mediterráneo oriental y Grecia, simulando un ataque a las instalaciones nucleares iraníes. El 20 de junio, Ehud Olmert se reunió secretamente con el coronel retirado Aviam Sela -cerebro de la operación que destruyó el reactor nuclear Osirak de Irak en 1981- y también con el Comité estadounidense-israelí de asuntos públicos (AIPAC). Llamó a “la comunidad internacional” a tomar medidas “drásticas” contra Irán. El viceprimer ministro Shaul Mofaz dijo que el ataque contra Irán es “inevitable”. La razón siempre es la misma, a pesar del informe de los dieciséis servicios de inteligencia norteamericanos, que coinciden en afirmar que Irán cesó en el 2003 su programa militar-nuclear. La Casa Blanca aumento en u$s 170.000 millones la ayuda militar a Israel, con el visto bueno ACTIVO de demócratas y republicanos.

La AIPAC no celebra más encuestas entre la comunidad judía que en noviembre del 2007 se opuso sin medias tintas a una intervención militar contra Irán: el 73% se pronunció en contra, frente a sólo un 18% “guerrerista”. Claro que la agresión israelí tendrá una respuesta igual o superior y es inevitable que comience una espiral de previsibles consecuencias. He aquí la hipótesis de la futura guerra, buscada y alimentada por las burguesías imperialistas norteamericana y europea, única “salida” para la crisis del sistema capitalista.

Observando, objetivamente, el desempeño militar de Estados Unidos e Inglaterra en Irak y en Afganistán, es de prever que la desesperación política y económica de la burguesía imperialista se materialice en la aceleración de su crisis, arrastrando a la humanidad hacia una posible guerra nuclear, a pesar de las inmensas expectativas, ilusiones y esperanzas que alienta y derrama sobre el pueblo estadounidense para engañarlo y arrastrarlo a una futura guerra, poniendo al frente a sus dos títeres mas prestigiados: John McCain y Barack Obama. Republicano uno, demócrata el otro. Identidades políticas que alguna vez en la historia significaron algo: los primeros lucharon contra el esclavismo antiguo, a favor del esclavismo moderno; y los segundos defendieron el esclavismo antiguo, hundiendo al pueblo en una guerra civil. Ambos son artífices y grandes beneficiarios de la Doctrina Monroe, de la política del “gran Garrote” y de la esclavización de millones y millones de seres humanos en todo el planeta. Y que hoy son causantes y beneficiarios de las guerras, golpes deestado, el hambre y la miseria de las dos terceras partes de la humanidad. Gane quien gane las El Combatiente Nº 31elecciones de noviembre, nada cambiará como nos quieren hacer creer sus escribas, sus mercenariosy prostitutos medios de comunicaciones. ¿Cómopueden cambiar algo, cuando son accionistas del complejo militar industrial…? La mayoría de los senadores y diputados del Congreso de Estados Unidos son accionistas de las empresas fabricantes de armas, de las compañías de “seguridad”, de las “empresas” que reclutan mercenarios, de las sociedades que se apoderan y explotan los bienes robados a los países ocupados. No es de extrañar que se voten, prácticamente sin oposición, extensiones de fondos para la guerra en Irak, Afganistán y para pagar a grupos terroristas que agredirán, desde las fronteras, a un país soberano como es Irán. ¿Qué dicen McCain y Obama…?: votan a favor y repiten las mismas mentiras que Bush… No es un problema de género ni de razas: es una clara posición y elección de intereses de clase.

Pero, “el hombre propone y la lucha de clase dispone”… La guerra presupone enemigos y aliados. El mundo ha cambiado en estos últimos meses y los alineamientos también. La confianza en el omnipotente gendarme mundial está muy mellada, como deterioradas están las lealtades de muchas burguesías hacia quien, hasta ayer, era su amo.

También están insinuándose los antiguos y nuevos odios de los nunca nombrados, los invisibles, los eternos explotados y humillados que, por millones, se mueven por una u otra razón, porque intuyen que juntos son más que uno y que, para sobrevivir, tendrán que pelear, pues si se pelea hay esperanzas. El proletariado con su canto de futuro y progreso empieza a salir de su letargo después de la dolorosa derrota. La burguesía pone frente a sus ojos sus últimas creaciones para entretenerlo y desviarlo, pero son payasos y títeres que a nadie pueden engañar por mucho tiempo: sus muecas son viejas y conocidas. Muecas de “heroísmos”, de firmeza como el del “rescate” de prisioneros enColombia, que ha desatado cataratas de comentarios “pacifistas”, “no violentos” y comparaciones ahistóricas y sensibleras, condenando a las FARC públicamente y no El Combatiente Nº 31como debería ser -y que todos los revolucionarios lo saben- MANO A MANO, CARA A CARA, no utilizando los medios del enemigo… Ignorando que la “crueldad” no es una decisión impuesta por los combatientes de las FARC, sino que es consecuencia de las condiciones que impone el enemigo. Ese enemigo que ha acumulado experiencia y mucha, desde 1959 hasta hoy. Enemigo que tiene las posibilidades y condiciones para un trato humano no sólo con los prisioneros en Guantánamo, sino en todo el mundo, pero que sin embargo opera en cárceles secretas, ha fabricado decenas y decenas de campos de concentración en todo el mundo ¡hasta en su propio territorio…! Un enemigo que viola todas las normas humanitarias consagradas en los tratados internacionales. Un enemigo que DEBE ser llevado a un TRIBUNAL INTERNACIONAL, JUZGADO, CONDENADO Y COLGADO PÚBLICAMENTE. Esa debe ser la POSICIÓN IRREDUCTIBLE DE LOS REVOLUCIONARIOS. Las actitudes condenatorias del accionar de las FARC tienen un solo nombre: OPORTUNISMO.

No podemos ni debemos sumarnos al pacifismo y a la utilización de la “no violencia” cuando es utilizada con claro interés de clase. Nosotros, los revolucionarios, no usamos ni usaremos la violencia como arma política de ataque, la usaremos como LEGÍTIMA DEFENSA.

La burguesía financiera imperialista está representando su último acto. Nada puede resolver. Su momento en la historia de la humanidad está entrando en el definitivo ocaso.

Mario Roberto Salvatierra.

ENTRE ESOS TIPOS Y NOSOTROS HAY ALGO PERSONAL

El Combatiente Nº 31Como consecuencia del “conflicto del campo”, especialmente fogoneado por los medios televisivos, por estos días comienza a instalarse un cierto clima de incertidumbre que lleva a la población a preguntarse sobre la “estabilidad” de la “democracia”. Ante esta zozobra, más de uno ha escrito alertando sobre qué son los “golpes suaves” y las teorías de la “no violencia”.
                           
¿De qué se está hablando, precisamente?

En 1950, es decir hace más de medio siglo, el médico argentino Ramón Carrillo escribía “La guerra psicológica”, un texto que detalla para qué y cuándo se utiliza este paquete de medidas de acción psicológica, además de agregar que, en nuestro país, un “maestro” de este tipo de accionar fue el General San Martín.

En el mencionado texto, Carrillo sostenía que: “…el objetivo primo de la guerra psicológica es crear, en el o los adversarios, un clima mental, una serie de sentimientos que, conduciéndolos por las sucesivas etapas del miedo, del pánico, de la desorientación, del pesimismo, de la tristeza, del desaliento, en fin, los lleve a la derrota. Y viceversa, crear en el medio propio un clima neutralizador de esos sentimientos. El clima de la rabia, con todos sus matices. En una palabra: un clima de derrota y otro de victoria, de donde tenemos los dos aspectos de la guerra psicológica: el ofensivo y el defensivo, que por la parte contraria debilita al adversario y por la propia lo exalta.”.

Uno de los elementos esenciales para establecer una guerra psicológica es delimitar perfectamente el campo “enemigo”. En este país, con de 30.000 militantes populares desaparecidos y toda una generación perseguida como consecuencia del sangriento golpe militar de 1976, no es difícil agitar los miedos colectivos ante un posible “golpe”. Para quienes alientan los golpes, la burguesía y sus ejecutores, ambos integrantes del PARTIDO MILITAR, el “enemigo” somos nosotros…

Y cuando decimos nosotros nos referimos a los trabajadores, los desocupados y sectores medios de la sociedad.

¿Cuál es el mejor fantasma para agitar y asustar a nuestra población?

La respuesta más obvia es la del “golpe”, teniendo en cuenta nuestra historia reciente. El “golpe”, como tal, resucita a la muerte como herramienta de control social para mantener el status quo, es decir, no hagamos olas que se viene el “golpe”…

Decía Carrillo: “El miedo es un estado psíquico reflejo, establecido pues inconscientemente, incontrolable, que paraliza las actividades de la guerra y detiene asimismo toda defensa. Se produce cuando el instinto de conservación se ve acosado por un hecho exterior que amenaza la integridad física o moral del individuo.

El que tiene miedo, ya se sabe, pierde toda posibilidad de defenderse.

Este estado psíquico del miedo atraviesa por distintas etapas ascendentes: la prudencia, la cautela, la alarma, el temor controlable, la ansiedad que puede hacerse angustiosa y hasta desesperada, el pánico y, finalmente, el terror.”.

Los “Golpes Suaves” consisten en la subversión del orden establecido, sostenida por los medios de comunicación, Internet, mensajes a través de celulares, apoyo financiero y asesoramiento a grupos opositores por parte de las agencias de inteligencia extranjeras, guerra psicológica y desconocimiento de la legalidad y la constitucionalidad. ¿Alguna coincidencia con nuestra realidad…? ¿Es constitucional ocupar las rutas impidiendo el paso del transporte de alimentos…? ¿Es legal desabastecer a toda una población en nombre del conflicto del “campo”? ¿A los intereses de quiénes responden estos sectores…?

Para tener una idea sólo haremos una breve descripción del ideólogo de la “no violencia”, Gene Sharp, fundador del Instituto Albert Einstein.

Sharp ha teorizado acerca de cuáles son las acciones “no violentas” que, a la postre, sirven para desestabilizar gobiernos. Muy comedido, desde 1950, este señor se ha dedicado con prolijidad a aceitar su teoría. En 1985 publicó una obra sobre Cómo Hacer que Europa sea Inconquistable, cuya edición europea fue prologada por George Frost Kennan, figura clave de la Guerra Fría.

En 1989, Sharp colaboró con la Alianza Democrática de Birmania, una coalición de anticomunistas que logró entrar al gobierno militar, y también acompañó al Partido Progresista Democrático de Taiwán, opositor a China comunista. Como si fuera poco, unificó a los diferentes grupos tibetanos de oposición alrededor del Dalai Lama, un agente de la CIA. Justamente, cuando la CIA vio el enorme potencial de Sharp y su Instituto Albert Einstein, decidió incorporar en él a un especialista en acción clandestina: el coronel Robert Helvey, por entonces decano de la Escuela de Formación de Agregados Militares de Embajadas…

A fines de 1990 Gene Sharp y su equipo viajaron a Suecia y asesoraron a varios políticos lituanos para que organicen la resistencia popular al Ejército Rojo. En 1991, cuando estalla la crisis y Gorbatchov despliega sus fuerzas especiales, Gene Sharp actúa como consejero del partido separatista Sajudis (Grupo de Iniciativa por la Perestroika). Podríamos seguir con la larga historia del doctrinario de los “golpes suaves” y la “no violencia”.

Los ideólogos y apologistas de los “golpes suaves” los definen como expresiones pacíficas de los pueblos que se revelan contra un régimen tiránico.

El Combatiente Nº 31Nada de lo que sucede en nuestro país está al margen de lo que ocurre en el mundo.

El PARTIDO MILITAR es experto en operaciones de prensa y propaganda con objetivos de acción psicológica. Los empleó durante todas las dictaduras y los aceitó, especialmente, durante la última, en 1976.

En este contexto descripto se hallan prácticamente todos los medios de prensa, particularmente los canales de televisión por aire y cable, exagerando y funcionando como amplificadores de una pugna interburguesa que, sin ellos, no hubiera tenido la relevancia que ha adquirido: el conflicto del “campo”.

Mientras mantienen expectantes a toda la población con los cortes de los piqueteros terratenientes, paralelamente, surgen, como por arte magia, las versiones de un “golpe”… Tal como dice Carrillo, esta acción psicológica sobre las masas tiene dos objetivos: por un lado, actuar sobre el supuesto “enemigo” (nosotros) sembrando poco a poco el miedo para detener cualquier intento popular de defensa ante la  inflación, el desabastecimiento y el devenir político; y, por otro, levantar la moral de los chacareros y sus seguidores que son una minoría pero que pretenden convencernos de que son una mayoría.

Lo que en todos los medios gráficos y televisivos se presentó como una “autoconvocatoria espontánea” para describir los cacerolazos que antecedieron al tratamiento de las retenciones en el parlamento, en realidad fue una convocatoria que contó con toda una parafernalia de tecnología que distribuyó miles de mensajes de texto anónimos por celular y miles de correos electrónicos en cadena, convocando a la “espontánea” manifestación…

La radio pasillo, el teléfono descompuesto, las medias palabras, las preguntas periodísticas capciosas, los programas políticos radiales y televisivos en cadena, todos, dejaron entrever el “peligro” del “golpe”… Todos, sin excepción, intentan avivar nuestro miedo más primitivo: el temor a la muerte. Porque todos sabemos que ellos SON NUESTRA MUERTE.

Muchos políticos burgueses de oposición, como Lilita Carrió, por ejemplo, convocaban a manifestarse “sin violencia” y en “paz”… Ninguno de ellos se hizo cargo de que abona a la desestabilización política, proyecto que el PARTIDO MILITAR nunca descartó.

Está en nosotros ser concientes de que más allá de la apariencia “inocente” de una noticia, se esconden verdaderos intereses de clase. No debemos caer en sus trampas. No debemos olvidar que para ellos SIEMPRE somos el “enemigo”. Tampoco debemos olvidar que aún en aparentes tiempos de “paz” para ellos la guerra continúa.

¿Y nosotros qué hacemos…?

A nosotros nos queda, simple y sencillamente, organizarnos para defender nuestros intereses que jamás serán los de ellos.

Amanda Cánepa.

1917: CUANDO EL ROJO FUEGO DE LA CONCIENCIA TOMÓ EL CONTROL

El Partido de Lenin fue así el único en Rusia que comprendió desde el primer período los reales intereses de la revolución. Fue el único que comprendía la ley y el deber de un partido auténticamente revolucionario y a través de la consigna de todo el poder al proletariado y a los campesinos, aseguró la continuidad de la revolución

Rosa Luxemburgo
“Crítica de la Revolución Rusa”, 1918

Las clases poseedoras oponen resistencia... sus partidarios entorpecen la labor de los funcionarios, invitan a los empleados del banco a que se crucen de brazos, tratan de interrumpir las comunicaciones ferroviarias, postales y telegráficas... les advertimos que están jugando con fuego. Oponerse a la revolución es cometer un crimen contra el pueblo. Advertimos a las clases pudientes y sus partidarios que si el sabotaje no cesa y el aprovisionamiento se ve interrumpido, ellos serán los primeros en sufrir las consecuencias

Comité Militar Revolucionario, 20 de noviembre 1917

Noviembre de 1917. El sol derrama sus primeros rayos sobre la plaza Skobelev. Un periodista norteamericano recorre Moscú bombardeada por la reacción.

En las calles, con edificaciones convertidas en escombros, circulan vehículos, tranvías y carros cargados de obreros con fusiles en busca de algún enemigo oculto. Los últimos enfrentamientos se produjeron por la noche. Las iglesias están cerradas. La de la virgen de Iberia, que sirvió de bastión a las fuerzas burguesas, fue abandonada por el cura que huyó ante el avance incontenible del ejército proletario. El prelado ortodoxo de Moscú, Tijón, excomulgó a todos los soviets.

Las paredes que aún se alzan están empapeladas de afiches que proclaman: “…¡Ciudadanos de Rusia! El gobierno provisional ha sido derrocado. El poder ha pasado a manos del Comité Revolucionario, órgano del Soviet de Diputados Obreros y Soldados de Petrogrado, que se encuentra a la cabeza del proletariado. La causa por la que el pueblo se ha lanzado a la lucha: proposición inmediata de una paz democrática, abolición de la gran propiedad de la tierra control de la producción por los trabajadores y creación de un gobierno soviético, ha triunfado definitivamente, viva la revolución de los obreros, soldados y campesinos”.

Un joven obrero llamado Baklanov, que se presenta como comandante del grupo de las Guardias Rojas que rastrillaban la zona, acercándose al periodista le pide su permiso para circular. El norteamericano le muestra un salvoconducto sellado por el Comité Militar Revolucionario a nombre de John Reed. El joven le indica al extranjero que tenga cuidado ya que todavía quedarían elementos de las bandas reaccionarias del Comité de Salvación Pública ocultándose en los edificios. Más adelante, se propagan las voces de la muchedumbre.

  • ¿Qué es lo que pasa?- pregunta Reed al comandante, señalando la calle donde los sonidos anuncian la próxima presencia de la multitud.
  • Son los funerales de los caídos por la libertad- contestó Blakanov con voz severa y sus ojos inundados de lágrimas.

El Combatiente Nº 31Quinientos hombres y mujeres entregaron sus vidas en aquella jornada…

Quinientos obreros, campesinos, soldados e intelectuales: las masas construyen la historia con su propia sangre. Fueron ellas las que ocultaron a sus dirigentes después de la salvaje represión del 17 (4 de julio), cuando los obreros de las fábricas salieron a manifestarse y el Primer Regimiento de ametralladoras se plegó a esta protesta. Fueron las masas las que transformaron aquella concentración en una acción política contra el gobierno provisional. Más de medio millón de personas participaron bajo la consigna “todo el poder a los soviets”, llamando a la insurrección. El Comité Central y la organización militar del POSDR decidieron intervenir, pero debido a que las condiciones no estaban maduras para tomar el poder, acordaron darle un carácter pacífico y organizado a las acciones del proletariado. Tiempo después, diría Lenin: “En 1905, nuestros soviets no fueron, por decirlo así, más que un embrión, pues existieron sólo unas semanas. Es evidente que en las condicionesde entonces no podía ni pensarse en su desarrollo completo. Otro tanto acontece en la revolución de 1917,pues el término de varios meses es extremadamente corto y, sobre todo, porque los dirigentes eseristas y mencheviques prostituían los soviets, los convertían en corrillos de parlanchines, en apéndices de la política conciliadora de los caudillos. Bajo la dirección de los Líber, Dan, Tseretelli y Chernov, los soviets se iban descomponiendo y pudriendo en vida. Los soviets sólo podrán desarrollarse verdaderamente, desplegar a fondo sus fuerzas potenciales y su capacidad al adueñarse de todo el poder del Estado, pues de otro modo no tienen nada que hacer y quedan reducidos a simples células embrionarias. La “dualidad de poder” es la parálisis de los soviets.”

El gobierno reprimió violentamente a los obreros con la complicidad de las direcciones mencheviques y eseristas de los soviets.

Los enfrentamientos se reprodujeron a lo largo de Petrogrado. Las organizaciones del Partido dirigieron la furia de los oprimidos de manera efectiva. Las masas levantaron barricadas, cortaban comunicaciones, realizaban acciones punitivas. Las calles se convirtieron en campos de batalla en donde se libraba la más encarnizada lucha de clases. El Partido decide replegar de manera organizada a los manifestantes que habían alcanzado el techo de su desarrollo. Era necesario evitar el derramamiento estéril de sangre. Luego vinieron los allanamientos a los locales partidarios, los arrestos masivos de dirigentes, las ejecuciones, los atentados.

Aquellas jornadas significaron el desprestigio absoluto e irreparable de los mencheviques frente a las masas y el agotamiento de la lucha pacífica. La insurrección armada estaba a la orden del día. Lenin pasó a la clandestinidad refugiándose en un barrio obrero en las afueras de Petrogrado. “De las masas se aprende” parece repetir desde el pasado... Vladimir observaba cuidadosamente las conductas de cada clase frente a la crisis revolucionaria. Percibía el lenguaje oculto y los intereses que esconde. Así solía referirse a dos anécdotas que ilustran la coyuntura: sus largas charlas con un ingeniero que tiempo atrás había militado en el partido bolchevique y que ahora estaba aterrado frente al avance del proletariado: “¡Si fuesen cultos por lo menos, como los obreros alemanes!” renegaba.  “No es la revolución... es el abismo”, sentenciaba perplejo por la violencia y el aparente caos que reinaba por aquellos días. El ingeniero comprendía sólo de palabra todo el proceso, sentía una resistencia indescriptible frente al cambio radical de la situación. En absoluta contraposición, se encontraban los dichos a Lenin del obrero calificado que lo había refugiado en su casa. Al servir la comida, aquel hombre grande y bonachón exclamó: “¡Mira qué magnífico pan! Es que ahora ellos no se atreven a darnos pan malo”. La conclusión que Lenin extrae es un ejemplo de la humildad de un revolucionario. “Me sorprendió aquella apreciación de clase de las jornadas de julio. Mi pensamiento giraba en torno a la significación política de lo sucedido, valoraba el papel de los acontecimientos en la marcha general de las cosas, analizaba de qué situación había brotado aquel zigzag de la historia y qué nueva situación provocaría, cómo debíamos modificar nuestras consignas y nuestro aparato de partido para adaptarlo a las nuevas circunstancias. Yo, hombre que he conocido la miseria, no había pensado en el pan. Para mí, el pan era como algo que brotase por sí mismo, como una especie de producto accesorio del trabajo del escritor. A lo que es la base de todo, a la lucha de clases por el pan, el pensamiento llega, a través del análisis político, siguiendo un camino extraordinariamente complicado y tortuoso. Y he aquí que un representante de la clase oprimida, aunque fuese uno de los obreros bien pagados e instruidos, ponía el  dedo en la llaga con esa sencillez y esa rectitud admirable, con esa firme decisión y esa asombrosa claridad de pensamientos de la que a nosotros, los intelectuales, nos separa una distancia tan grande como de la tierra al cielo”.

El Combatiente Nº 31John Reed observa la muchedumbre que comienza a surgir desde las esquinas poblando la Plaza Roja. Bajo el portal de Iberia, bordeando los muros del Kremlin, desde todas partes aparecen hombres y mujeres, ancianos y niños, portando los retratos de sus familiares caídos. Vuelven, así, sorteando las lápidas del silencio y su abismo. Son liberados de las impúdicas mazmorras que enterraron sus cuerpos. Con sus figuras alumbran los recuerdos de la barricada. Los nombres de los fusilados son pronunciados en voz alta nuevamente. ¡Tantas veces en su sangre germinó la rebelión y tantas pagaron, con el destierro, el osado deseo de asaltar el poder y colectivizar el sueño!

1905: no está tan lejos el tiempo en que la única manifestación de lucha del pueblo contra la autocracia eran las revueltas, es decir, los motines no concientes ni organizados, espontáneos y, a veces, feroces. Pero el movimiento obrero, como movimiento de la clase más avanzada del proletariado, ha salido pronto de esa fase inicial. La propaganda y la agitación conciente de la socialdemocracia han cumplido su misión. Los motines se han convertido en huelgas organizadas y en manifestaciones políticas contra la autocracia. Las feroces represiones han “educado” durante varios años al proletariado y a las masas urbanas: los han preparado para las formas superiores de la lucha revolucionaria.

Vuelven a las calles los caídos en Odesa, en el Cáucaso, en Lodz, en Libava. El proletariado levanta sus nombres como bandera. Las masas construyen en cada acción, cada mitin, con cada intervención, el futuro de la revolución, su propio devenir. “El día del soviet de Petrogrado se señaló con numerosos mitines, en los que reinó un entusiasmo inmenso”, comentaba el socialrevolucionario de izquierda Mstislavski. “Hablábamos con claridad a las masas de la próxima toma del poder y nuestras palabras eran acogidas con aprobación”, cuenta el bolchevique Pestkovski que desarrolló una intensa agitación en las fábricas de la isla Vasili. “A mi alrededor reinaba un estado de ánimo semejante al éxtasis”, describe Sujánov al mitin realizado en la Casa del Pueblo y continúa: “aquella multitud ingente alzó los brazos como un solo hombre. Vi los brazos en alto y los ojos ardientes de los hombres, de las mujeres, de los muchachos, de los obreros, de los soldados, de los campesinos y de figuras típicamente pequeño burguesas”. El bolchevique Popov comenta el juramento de las masas aquel día: “lanzarse al ataque al primer llamamiento del soviet”. La guarnición de Pedro y Pablo se pasa entera al lado de la revolución, su compromiso fue claro: no someterse a nadie más que al Comité Militar Revolucionario. Laschevich y Trotsky cumplieron con la tarea encomendada, el mitin del 23 de octubre nombró al teniente Blagonravov comisario del regimiento. El arsenal  de Kronverk fue ocupado por sus obreros, quienes aportaron al Comité Militar Revolucionario 100.000 fusiles. El regimiento de Preobrajenski también se pronuncia por la insurrección…

El proletariado comienza a marchar, John Reed observa las banderas rojas del Comité Central a la cabeza. Cada fábrica tiene su nombre inscripto en grandes estandartes. Los obreros desfilan con sus herramientas y sus armas. En el medio de las columnas se forman huecos de aire que se completan con ataúdes envueltos por la roja insignia. Otros son cargados en hombros por la multitud. Un compañero bolchevique de piel curtida por los años y la explotación se acerca a Reed y señalando uno de los féretros comenta: “es la camarada Vera Slutskaia, era diputada bolchevique, fue asesinada por los cosacos durante una tregua”.

John no puede contener la admiración que le provoca ver a todo el pueblo en la calle. Saca del bolsillo y relee el folleto que compró en Nevski “¿Se sostendrán los bolcheviques en el poder?”, donde Lenin da respuesta al interrogante. Luego vendrán los días de arduo trabajo, las masas tomarán en sus propias manos el aparato estatal. La Duma municipal de Petrogrado será disuelta.

Con la revolución, también vendrá la paz: “El Consejo de Comisarios del Pueblo estima indispensable proponer un armisticio inmediato a todos los pueblos beligerantes, tanto aliados como enemigos.”. También la nacionalización de los bancos: “1- las operaciones de banca se declaran monopolio del Estado; 2- todas las sociedades anónimas y oficinas privadas de banca se fundirán en el Banco del Estado”; la aplicación efectiva del decreto sobre la tierra: “1- la gran propiedad sobre el suelo se declara inmediatamente abolida sin ninguna indemnización; 2- las fincas de los terratenientes, al igual que todas las tierras de la corona, los conventos, la iglesia con todos sus ganados y aperos, sus edificios y todas sus dependencias pasan a depender de los Comités Agrarios Comarcales y de los Soviets de Diputados Campesinos de distrito; 3- todo detrimento causado a los bienes confiscados, que de ahora en adelante pertenecen a todo el pueblo, se proclama como delito grave, que castigarán los tribunales revolucionarios”; la reorganización democrática del ejército: “1- el ejército, puesto al servicio de la voluntad del pueblo trabajador, se haya subordinado al organismo supremo representante de esta voluntad: el Consejo de Comisarios del Pueblo; 2- dentro de cada unidad o cuerpo de tropa, la autoridad plena corresponde a los Comités y Soviets respectivo de soldados; 3- las manifestaciones de la vida y actividad de las tropas colocadas bajo la gestión de los comités deben ponerse desde ahora bajo su dirección inmediata. Para las ramas de la actividad cuya responsabilidad no puedan asumir los comités...; 4- se instituye el régimen de elegibilidad de los cuadros de mando y administración. Los suboficiales y oficiales hasta el mando de regimiento inclusive, serán elegidos mediante sufragio universal, por sus escuadras, secciones, compañías, escuadrones, baterías y regimientos. Los oficiales superiores al mando de regimiento, hasta el comandante supremo inclusive, serán elegidos en los congresos o conferencias de los diferentes comités”. Los periódicos burgueses serán cerrados: “la prohibición de los periódicos burgueses no ha sido solamente un medio de combate en el curso de la insurrección y durante el aplastamiento de las tentativas contrarrevolucionarias; ha sido también una medida transitoria indispensable para el establecimiento del nuevo régimen de prensa, bajo el cual los capitalistas, poseedores de las imprentas y el papel, no pueden seguir siendo los fabricantes todopoderosos de la opinión pública. Debemos ahora proseguir la obra iniciada, procediendo a la confiscación de las imprentas privadas y los depósitos de papel y entregándolas al poder soviético, en la capital y en las provincias”.

John Reed se mezcla con la muchedumbre que canta los himnos de guerra del proletariado. La Internacional suena como fondo…

La revolución está en marcha.

Pablo Agusto Abaddón.